El cantante Justin Bieber no ha tenido más remedio que cancelar todos los conciertos de su gira mundial 'Justice' que estaban programados en Estados Unidos para los meses de junio y julio. El intérprete necesita moverlos a fechas más lejanas para seguir recuperándose de la parálisis facial que sufre desde hace días, derivadas del síndrome de Ramsay Hunt que le ha sido diagnosticado.
Poco antes de dar a conocer el alcance de su dolencia, el astro de la música ya había aplazado tres conciertos que debería haber ofrecido esta semana en Toronto y Washington. Teniendo en cuenta que necesitará mucho más tiempo para lidiar con los efectos del síndrome, resulta comprensible que no pueda subirse a los escenarios hasta, al menos, el mes de agosto.
De hecho, una de sus actuaciones más esperadas estaba fijada para el 24 de junio, en solo siete días, y se enmarcaba en el SummerFest de Milwaukee, del que ejercía como una de sus cabezas de cartel. La promotora AEG, que gestiona todos los preparativos de su periplo mundial, ha emitido un comunicado para, entre otras cosas, tranquilizar a aquellos fans que ya daban por hecho que tendrían que devolver sus entradas. Con suerte, únicamente tendrán que armarse de paciencia durante unos meses.
"Justin sigue recibiendo el mejor servicio médico posible. Está muy animado con los progresos de su proceso de recuperación y está deseando volver a la carretera. A finales del verano volverá a actuar para sus fans", reza un extracto del comunicado emitido por la empresa.